Nuestra mente puede ser manipulada e influenciada desde el exterior. Un ejemplo de ello es lo ocurrido en las pasadas elecciones presidenciales de EEUU. Cambridge Analytica (CA) es una empresa londinense dedicada al uso de datos para “cambiar el comportamiento de audiencias”. CA usó datos de perfiles de Facebook sin el consentimiento de los usuarios mediante un test de personalidad, que operó como un acumulador de información para recopilar alrededor de 50 millones de muestras, que permitieran conocer perfiles políticos de votantes estadounidenses y así, redireccionar las preferencias de éstos. De esta manera se puede manipular las preferencias de las personas por un candidato en particular, mediante la creación de publicidad seccionada, según cada perfil y creando noticias falsas (fake news), lo cual se evidencia en diversos casos de éxito en la manipulación de la mente de muchas personas.
Del mismo modo que con nuestras tendencias políticas, el mundo quiere imponer sus malos ideales día a día en nuestra mente, a través de los programas de televisión que vemos, los canales de Youtube a los que estamos suscritos, las series de Netflix que consumimos, las personas a las que decidimos seguir en nuestras redes sociales. ¿Cuántas veces no hemos tenido un cambio de vocabulario o de comportamiento por empatía con lo visto u oído?
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Entonces ¿qué es la mente? La mente es el conjunto de facultades cognitivas que engloban procesos como la percepción, el pensamiento, la conciencia, la memoria, imaginación. En ella es donde día a día planeamos y ejecutamos acciones cotidianas o tomamos decisiones que pueden cambiar el rumbo de nuestras vidas, desde lo más insignificante, hasta algo de suma importancia, todo pasa primeramente por nuestra mente; es por esto que en Proverbios 23:7 RVR se dice que “tal es el pensamiento del hombre en su corazón, tal es él”. Por la importancia que tiene la mente en la vida del ser humano es que día a día se vive un campo de batalla en ella, entre los pensamientos buenos y los pensamientos malos.
Teniendo en cuenta la manipulación a la que estamos sometidos día a día, tenemos que tomar la decisión sobre qué tipo de pensamientos dejamos que dominen nuestra mente y determinen el rumbo de nuestra vida. Dios nos aconseja a través de su palabra en Filipenses 4:8 TLA que pensemos en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece gratitud. Dios es perfecto y conoce lo mejor para nosotros y sus pensamientos son siempre de bien, por eso debemos poner nuestra mente y corazón en sus manos para que sea transformada nuestra forma de pensar y como consecuencia de esto sea renovada nuestra manera de vivir.
Autor: Cristhian Felipe Rueda R.